GONZALO CAMPOMAR, EL EXRUGBISTA ACUSADO DE DEFRAUDAR A AMIGOS E INVERSIONISTAS, ES HIJO DE UN EXJERARCA DE LUIS LACALLE HERRERA
Crónicas del Este 05/11/2024 Política
La Dirección General de Lucha Contra el Crimen Organizado e Interpol de la Policía están al frente de una investigación de alto perfil que tiene en vilo a Uruguay: un esquema de estafa piramidal vinculado a criptomonedas, el cual podría haber dejado pérdidas de hasta 65 millones de dólares. En el centro de la trama se encuentra Gonzalo Campomar Santander, un exjugador de rugby y empresario, señalado por decenas de personas como el autor de un fraude que habría perjudicado tanto a amigos cercanos como a conocidos de diversos sectores, incluidos algunos con lazos en actividades ilícitas. Revelado por el periodista Eduardo Preve en su columna "La Tapadita," este caso podría convertirse en uno de los fraudes privados más impactantes de los últimos tiempos en el país.
Según la información revelada, Campomar ofrecía a sus inversionistas una atractiva rentabilidad en dólares, prometiendo hasta un 2% de retorno, lo que captó rápidamente el interés de personas de diferentes ámbitos. Al principio, los pagos de intereses se cumplieron con puntualidad, generando una falsa seguridad entre los primeros inversionistas, quienes vieron en Campomar a una figura confiable y rentable. Sin embargo, la situación cambió cuando el esquema piramidal colapsó, dejando a muchos inversionistas sin la posibilidad de recuperar su dinero.
Entre las víctimas de esta presunta estafa se encuentran antiguos amigos y compañeros de Campomar, además de otros inversionistas de distintos sectores sociales. El impacto ha sido tal que algunos de los afectados, entre ellos personas de los barrios más acomodados de Montevideo como Carrasco, y otros provenientes de entornos de mayor vulnerabilidad, han sido incapaces de presentar denuncias debido a la falta de contratos formales.
HIJO DE POLÍTICO
Este escándalo no solo ha llamado la atención por la magnitud de las pérdidas, sino también por el perfil del acusado. Gonzalo Campomar Santander es hijo de Jorge Celso Campomar Barrios, un abogado y político uruguayo con una larga trayectoria en cargos públicos, habiendo sido un hombre de confianza del expresidente Luis Alberto Lacalle Herrera. Jorge Campomar ocupó importantes roles en la administración pública: fue Director Nacional de Comercio y Abastecimiento, Director General de Secretaría del Ministerio de Economía y Finanzas, y Subsecretario del mismo ministerio en 1995, durante el gobierno de Lacalle Herrera.
Además, Jorge Campomar fue integrante del Directorio de la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (ANCAP) entre 1998 y 2001, y luego, del Directorio de la Administración Nacional de Puertos (ANP) desde 2001 hasta 2005. Su cercanía a figuras destacadas del Partido Nacional, así como su rol como dirigente en el Club Atlético Peñarol y la Asociación Uruguaya de Fútbol, hacen que el caso de su hijo cobre aún más notoriedad, al vincularse con una familia históricamente ligada a la vida política y social del país.
UNA RED DE INVERSIONISTAS Y AMENAZAS DE COBRO
El caso ha tomado un giro oscuro, ya que entre los inversionistas perjudicados no solo se encuentran amigos y conocidos del exrugbista, sino también individuos de entornos complejos, incluyendo aquellos relacionados con actividades delictivas. En un intento de cobro de una de estas personas afectadas, se registró un ataque a balazos contra una vivienda en Colonia, lo cual refleja la gravedad y el alcance de las pérdidas.
La investigación ha revelado que Campomar no actuaba solo en este esquema. Su socio, un argentino que aparentemente también habría participado en esta estafa, se fugó a Estados Unidos y actualmente se encuentra en Orlando, lo que ha dificultado aún más el proceso judicial y la recuperación de los fondos.
La Dirección General de Lucha Contra el Crimen Organizado e Interpol de la Policía están al frente de una investigación de alto perfil que tiene en vilo a Uruguay: un esquema de estafa piramidal vinculado a criptomonedas, el cual podría haber dejado pérdidas de hasta 65 millones de dólares. En el centro de la trama se encuentra Gonzalo Campomar Santander, un exjugador de rugby y empresario, señalado por decenas de personas como el autor de un fraude que habría perjudicado tanto a amigos cercanos como a conocidos de diversos sectores, incluidos algunos con lazos en actividades ilícitas. Revelado por el periodista Eduardo Preve en su columna "La Tapadita," este caso podría convertirse en uno de los fraudes privados más impactantes de los últimos tiempos en el país. Según la información revelada, Campomar ofrecía a sus inversionistas una atractiva rentabilidad en dólares, prometiendo hasta un 2% de retorno, lo que captó rápidamente el interés de personas de diferentes ámbitos. Al principio, los pagos de intereses se cumplieron con puntualidad, generando una falsa seguridad entre los primeros inversionistas, quienes vieron en Campomar a una figura confiable y rentable. Sin embargo, la situación cambió cuando el esquema piramidal colapsó, dejando a muchos inversionistas sin la posibilidad de recuperar su dinero. Entre las víctimas de esta presunta estafa se encuentran antiguos amigos y compañeros de Campomar, además de otros inversionistas de distintos sectores sociales. El impacto ha sido tal que algunos de los afectados, entre ellos personas de los barrios más acomodados de Montevideo como Carrasco, y otros provenientes de entornos de mayor vulnerabilidad, han sido incapaces de presentar denuncias debido a la falta de contratos formales. HIJO DE POLÍTICO Este escándalo no solo ha llamado la atención por la magnitud de las pérdidas, sino también por el perfil del acusado. Gonzalo Campomar Santander es hijo de Jorge Celso Campomar Barrios, un abogado y político uruguayo con una larga trayectoria en cargos públicos, habiendo sido un hombre de confianza del expresidente Luis Alberto Lacalle Herrera. Jorge Campomar ocupó importantes roles en la administración pública: fue Director Nacional de Comercio y Abastecimiento, Director General de Secretaría del Ministerio de Economía y Finanzas, y Subsecretario del mismo ministerio en 1995, durante el gobierno de Lacalle Herrera. Además, Jorge Campomar fue integrante del Directorio de la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (ANCAP) entre 1998 y 2001, y luego, del Directorio de la Administración Nacional de Puertos (ANP) desde 2001 hasta 2005. Su cercanía a figuras destacadas del Partido Nacional, así como su rol como dirigente en el Club Atlético Peñarol y la Asociación Uruguaya de Fútbol, hacen que el caso de su hijo cobre aún más notoriedad, al vincularse con una familia históricamente ligada a la vida política y social del país. UNA RED DE INVERSIONISTAS Y AMENAZAS DE COBRO El caso ha tomado un giro oscuro, ya que entre los inversionistas perjudicados no solo se encuentran amigos y conocidos del exrugbista, sino también individuos de entornos complejos, incluyendo aquellos relacionados con actividades delictivas. En un intento de cobro de una de estas personas afectadas, se registró un ataque a balazos contra una vivienda en Colonia, lo cual refleja la gravedad y el alcance de las pérdidas. La investigación ha revelado que Campomar no actuaba solo en este esquema. Su socio, un argentino que aparentemente también habría participado en esta estafa, se fugó a Estados Unidos y actualmente se encuentra en Orlando, lo que ha dificultado aún más el proceso judicial y la recuperación de los fondos.
Dom | Mar | Mié | Juv | Vie | Sáb |
+18° | +17° | +18° | +18° | +22° | +22° |
+13° | +11° | +14° | +14° | +12° | +15° |